La jueza venezolana María Lourdes Afiuni, detenida en 2009 tras la supuesta liberación irregular de un empresario y en libertad condicional con medidas cautelares desde 2013, fue condenada este jueves a cinco años de prisión por «corrupción espiritual».
«Fue condenada cinco años por corrupción espiritual, pero no sabemos si volverá a la cárcel, porque de cárcel ya cumplió cuatro años y se le está condenando a cinco años por corrupción espiritual», dijo el hermano de la jueza, Nelson Afiuni.
Indicó, asimismo, que el juez que le dictó sentencia a su hermana le impuso a su vez medidas cautelares que ya mantenía desde hace años: «prohibición de salida del país, no hablar a la prensa, no hablar en las redes sociales y presentación cada 30 días ante tribunales». Afiuni señaló que no tiene claro por cuánto tiempo más deberá cumplir su hermana estas medidas cautelares, aunque presume que será por un año.
Por su parte, la exabogada de la jueza, Thelma Fernández indicó en su cuenta de Twitter que el cargo por el que se condenó a la que fue su defendida «establece una pena corporal conjuntamente con una pena pecuniaria correspondiente al dinero recibido por corrupción».
Pero, señaló, en el caso de Afiuni no hubo dinero, «ni promesa de este y entonces aplicaron el horror jurídico de una sentencia parcial».
María Lourdes Afiuni fue detenida en diciembre de 2009 por la supuesta liberación irregular del empresario Eligio Cedeño, detenido en 2007 bajo la acusación de efectuar operaciones cambiarias ilegales.
La magistrada fue acusada después de que el entonces presidente venezolano Hugo Chávez (1999-2013) la llamó «bandida» y pidió para ella la máxima pena de prisión.
La magistrada aseguró en un libro sobre su caso haber sido violada en prisión y denunció un deterioro de su salud producto de su tiempo en la cárcel, sin embargo cuando la Fiscalía la emplazó a presentar la denuncia para comenzar la investigación ésta se negó a hacerlo.
A lo largo de estos años, Afiuni tuvo varios defensores y el caso también pasó por distintos jueces, y su caso se convirtió en uno de los más sonados internacionalmente.
Organizaciones de derechos humanos internacionales y el Alto Comisionado de los Derechos Humanos han rechazado en diferentes ocasiones el procesamiento de
Afiuni por considerar que en su caso hubo «interferencia política».
Efe