Al cabo de cuatro meses de una inusual campaña realizada principalmente en redes sociales, el actor, comediante y novato en política Volodimir Zelenski logró este domingo una abrumadora victoria en la segunda vuelta presidencial en Ucrania ante el presidente saliente Petro Poroshenko, reflejando la desconfianza frente al poder de los electores de este país europeo.
El humorista de 41 años obtuvo 73,2 por ciento de los votos, contra 25,3 por ciento para su rival, de 53, según informó un sondeo oficial.
Algunos analistas atribuyen el insólito triunfo a que los electores, en realidad, no votaron por Zelenski, sino por el personaje que interpreta en una serie de televisión: el político Vasili Goloborodko. “Lo ven todas las semanas desde hace varios años. Votaron por que una persona al margen del sistema sea presidente e intente cambiar la política ucraniana desde dentro”, comentó el politólogo Vladimir Fesenko.
Lo ven todas las semanas desde hace varios años. Votaron por que una persona al margen del sistema sea presidente e intente cambiar la política ucraniana desde dentro
La mayoría de sus votantes esperan que Zelenski ponga fin a la guerra en el revuelto Donbás. Zelenski ha insistido en que pone “la vida humana” por delante de “un puñado de tierra”, aunque nunca ha renunciado a recuperar Crimea, la península anexada por Rusia en marzo del 2014.
Al respecto, en su primera rueda de prensa, el presidente electo prometió que continuará con “el proceso de Minsk”, acuerdo de paz firmado en 2015 para tratar de poner fin al conflicto con Rusia en Crimea, que costó 13.000 vidas.
El ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, ya había dicho horas antes que esperaba que Kiev respetara el acuerdo tras las elecciones.
Ucrania, uno de los países más pobres de Europa, depende de la ayuda internacional y de la energía rusa, de forma que el nuevo mandatario deberá negociar con Vladimir Putin y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Exceptuando la promesa de mantener una posición prooccidental, el programa de Zelenski es poco claro, a pesar de que en los últimos días intentó reforzar su credibilidad con consejeros especializados. Pero su margen de maniobra es muy estrecho debido a que carece de mayoría parlamentaria y las elecciones legislativas están previstas para el 27 de octubre.
AFP y EFE
