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En diálogo con el citado medio, aseguró estar emocionada con este método: “Solía correr a cualquier parte en un radio de cinco kilómetros: al supermercado, a la peluquería, a las cenas con mis amigos y a la iglesia”. Incluso, desistió de llevar su auto a Seattle y lo vendió.
Según detalló, en los últimos dos años, recorrió más de 430 kilómetros corriendo, lo que representa “el 11 por ciento de su kilometraje total” y explicó por qué lo hace: “Es al menos un 50 por ciento más rápido que caminar y evita las emisiones de carbono que genera el uso de un vehículo”.
La mujer de 30 años decidió ir al trabajo corriendo en Seattle
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Qué beneficios le brindó correr a la mujer que se mudó a Seattle y abandonó el uso del auto
Caminar tiene increíbles beneficios para la salud, por lo que correr, tiene aún más. Pero la mujer, en su entrevista con Business Insider, decidió relatar otras ventajas de hacerlo: conexión y comunidad. “Más que kilómetros, ir al trabajo corriendo me ha regalado conexiones que nunca hubiera hecho y conversaciones que nunca hubiera tenido”, reveló.
Incluso, relató una anécdota con un compañero de trabajo, a quien se cruzó corriendo mientras se atascó en el tráfico. “Cuando él aparcó, entró y me miró con incredulidad. Yo ya estaba abriendo mi correo en la oficina”, señaló. Además, reveló que correr le brindó mucha confianza en sí misma y la ayudó a relacionarse con otras personas.
