De acuerdo con el portal Providence Journal, funcionarios del Centro de Detención Donald W. Wyatt suspendieron a un oficial correccional después de que arrollara con su camioneta a varios manifestantes judíos que bloqueaban la entrada al estacionamiento de empleados de la instalación este miércoles por la noche.
Posteriormente, los manifestantes fueron rociados con gas pimienta, según relataron las personas presentes en la protesta, informó la cadena Vis á Vis.
La protesta fue la última manifestación de Never Again Action, un nuevo grupo judío que protesta por la política de inmigración de la policía migratoria (ICE) y Estados Unidos.
ICE guard weaponized his truck and drove into peaceful JEWISH protestors blocking the Wyatt Detention Center in Rhode Island.
THIS IS NOT OK!
Retweet pic.twitter.com/8K4l9B99PB
— StanceGrounded (@_SJPeace_) August 15, 2019
Un vídeo y publicaciones en las redes sociales de la protesta muestran una camioneta negra que conducía de 10 a 15 millas por hora hacia un grupo de 30 personas que estaban sentadas en fila y bloqueando la calle que da al estacionamiento del centro de detención.
Never Again Action publicó en su cuenta de Twitter que el automóvil pertenecía a un guardia del centro de detención.
De acuerdo con el reporte de Providence Journal, en un comunicado de prensa, Wyatt identificó al oficial de licencia como el Capitán Thomas Woodworth.
Un portavoz de la cárcel no dijo si Woodworth era el hombre que conducía el camión, pero en un video del incidente, se podía escuchar a los manifestantes gritando su nombre mientras rodeaban el vehículo cuando se detuvo.
This is Captain Woodworth, thinking about his decision to drive his truck through a crowd of people.
We all deserve to live in a world where such an act is unthinkable, and that’s the world we are trying to build.
Olam Chesed Yibaneh – We Will Build This World With Love pic.twitter.com/v7QHNtVscH
— ✡️ Never Again Action ✡️ (@NeverAgainActn) August 16, 2019
Minutos después, los guardias del centro de detención rociaron con gas pimienta a los manifestantes.
«Todos los que estábamos en las cercanías sufrimos parte del gas lacrimógeno. Fue impactante, inesperado. Hay un cierto riesgo cuando vas a una acción como esta. No esperas que se desarrolle así», afirmó Lex Rofeberg, uno de los manifestantes.