La justicia de El Salvador absolvió este domingo a Evelyn Hernández, una joven de 21 años acusada de homicidio agravado por la muerte de su bebé al dar a luz en un “parto extrahospitalario”, en un caso emblemático en un país con una severa legislación contra el aborto.
“¡Absuelta! Sí se pudo”, escribió en Twitter la abogada Bertha María Deleón, del equipo que defendió a Hernández, para quien la Fiscalía pidió una condena de 40 años. «Gracias a Dios se hizo justicia”, afirmó Hernández –cuyo embarazo fue producto de una violación– al salir del Centro de Justicia de Ciudad Delgado, en el noreste de San Salvador, donde se llevó a cabo el juicio.
El caso de Hernández se remonta al 6 de abril de 2016, cuando la joven tuvo un “parto extrahospitalario” en una letrina en su casa. Luego fue trasladada por un familiar al Hospital Nacional del municipio de Cojutepeque, donde fue denunciada ante las autoridades por el médico que la atendió, según lo señalaron sus abogados. Después fue detenida y acusada de homicidio agravado.
Decenas de mujeres se manifestaron este lunes a favor de Evelyn Hernández con letreros que decían «Justicia para Evelyn».
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El parte del Instituto de Medicina Legal no fue concluyente sobre lo ocurrido, aunque la defensa está convencida de que el bebé nació muerto porque aspiró meconio, el primer excremento que, al ser expulsado dentro del vientre, causa daño al feto.
Hernández había sido condenada en julio de 2017 a 30 años de cárcel por homicidio agravado, pero la sentencia fue anulada en febrero pasado por la sala penal de la Corte Suprema de Justicia, que argumentó la “falta de fundamentación” en las pruebas presentadas.
Tras esa contundente resolución, la Corte ordenó en febrero pasado la libertad de la joven y la apertura de un nuevo juicio con un tribunal diferente. “Fue duro todo el tiempo que estuve dentro”, expresó la joven, al aludir a los 33 meses que purgó en la cárcel tras su primera sentencia. “Mi futuro es seguir estudiando y sacar mis metas adelante. Estoy feliz”, manifestó emocionada.
Hernández reacciona al fallo del juez que la absolvió este lunes en El Salvador.
José Cabezas. Reuters
“Hoy tenemos una evidencia más de que no había delito alguno, que no había nada que perseguir”, declaró el abogado del Instituto de Derechos Humanos de la jesuita Universidad Centroamericana (Idhuca), Arnau Baulenas, quien se sumó a la defensa de Hernández y lamentó que muchos casos de mujeres en El Salvador se judicialicen “por convicciones religiosas”.
Tras conocerse el fallo, cuyo plazo de apelación para la Fiscalía son 10 días, Hernández les dio las gracias a un centenar de mujeres que clamaban por justicia frente al tribunal y estallaron en alegría al conocerse la decisión del juez. “¡Alerta, alerta, alerta que camina la lucha feminista por América Latina!”, corearon.
La directora para las Américas de Amnistía Internacional, Érika Guevara, dijo en un comunicado que el fallo a favor de Hernández “es una victoria rotunda para los derechos de las mujeres en El Salvador”. Además, la organización pidió al Estado salvadoreño poner fin a “la vergonzosa y discriminatoria práctica de criminalizar a las mujeres”, derogando “las normas draconianas antiaborto”.
Hoy tenemos una evidencia más de que no había delito alguno, que no había nada que perseguir
“Es un fallo muy importante, pues abre la esperanza de la recuperación de la libertad de todas las mujeres que están condenadas o privadas de libertad en este momento”, declaró la coordinadora de la Agrupación Ciudadana para la Despenalización del Aborto Terapéutico, Ético y Eugenésico, Morena Herrera.
En El Salvador hay 16 mujeres encarceladas por abortos o pérdidas gestacionales, en algunos casos en contextos de emergencias obstétricas, bajo la legislación que prohíbe la interrupción del embarazo en todas sus formas.
El Código Penal salvadoreño, en su artículo 133 establece una pena de 2 a 8 años por aborto. Sin embargo, fiscales y jueces tipifican los casos de aborto –incluso los espontáneos– como “homicidio agravado”, un delito penado con 30 a 50 años de prisión.
En el último año, cinco mujeres sentenciadas en este tipo de casos salieron de la cárcel, algunas de ellas con la pena conmutada.
AFP
